En el marco del lanzamiento de su libro «Los nuevos desafíos como padres del siglo XXI: Estrategias para acompañar exitosamente el uso de la tecnología en niños, niñas y adolescentes», en la 43° Feria Internacional del Libro de Santiago (FILSA), conversamos con la directora de la Escuela de Psicología de la Universidad Bernardo O’Higgins (UBO), Viviana Tartakowsky. Este libro, que combina investigación y experiencia personal, busca ofrecer herramientas prácticas para enfrentar los retos de la parentalidad en un mundo cada vez más digitalizado.
¿Qué la motivó a escribir este libro y cómo se conecta con su experiencia personal y profesional?
-El libro nace de la investigación realizada durante mi tesis doctoral, donde analicé la relevancia del acompañamiento parental en el entorno digital. Este tema me toca profundamente como madre, ya que he observado los efectos del uso excesivo de la tecnología en niños y adolescentes, desde problemas de atención hasta sedentarismo. Además, como psicóloga, me interesa aportar estrategias concretas para que las familias puedan ejercer una mediación digital efectiva.
¿Cuáles son las estrategias clave que propone para guiar el uso responsable de la tecnología?
-La confianza es fundamental. Como explico en el libro, construir una relación de confianza desde la temprana infancia es la base para ejercer una mediación parental digital activa. Este enfoque, basado en el trabajo de Livingstone (2018), propone acompañar activamente a los niños en su interacción con la tecnología, adaptando las estrategias según su rango etario y las dinámicas familiares. Además, destaco cómo la percepción de riesgo en el mundo virtual a menudo es minimizada por los adultos, cuando en realidad puede ser igual o más peligroso que el entorno presencial.
En este sentido, ¿cómo se integra su trabajo con las tendencias actuales en psicología infantil y adolescente?
-Es un imperativo que la parentalidad contemple tanto el mundo presencial como el virtual. En países como Chile, el avance tecnológico ha sido tan acelerado que ha superado las estrategias tradicionales de los padres. Mi libro invita a reconocer que este desafío es nuevo, que requiere aprendizaje continuo y alfabetización digital permanente, no solo para los niños, sino también para los adultos.
¿Qué rol juega la psicología en la solución de los problemas derivados del uso de la tecnología en las relaciones familiares?
-El concepto de mediación parental digital activa es clave. Acompañar a los niños y adolescentes según su etapa de desarrollo es esencial para evitar problemas como la adicción tecnológica, el bajo rendimiento académico o la falta de habilidades sociales. Por ejemplo, sabemos que para los bebés, el uso excesivo de dispositivos digitales puede ser perjudicial para su desarrollo cerebral. Por eso, incluso en esta era digital, el «chupete tradicional» sigue siendo mejor que el «chupete digital».
¿Se realizarán actividades en la UBO para implementar las estrategias descritas en el libro?
-Por supuesto. Este tema ya ha sido abordado en las clases que imparto, y el libro se lanzará oficialmente en la Universidad. Además, gracias al financiamiento de FIDE (Federación de Instituciones de Educación Particular), buscamos difundir estas estrategias en el ámbito educativo, tanto en la UBO como en otros espacios. Además, muchos estudiantes participaron en el lanzamiento en la Feria Internacional del Libro de Santiago, un evento que permitió visibilizar a la Escuela de Psicología y a la UBO a nivel nacional.
Finalmente, ¿qué mensaje quiere dejar a los padres y cuidadores que enfrenten este desafío?
-La parentalidad en el siglo XXI requiere valentía y disposición para aprender. Acompañar a nuestros hijos en el mundo digital no significa alejarlos de la tecnología, sino guiarlos con confianza y empatía, construyendo juntos herramientas que les permitan aprovechar sus beneficios y minimizar sus riesgos.