Fomentar el reciclaje, el uso responsable de los recursos naturales o la conciencia frente al deterioro medioambiental son las temáticas de los principales eventos del Siglo XXI. Sin embargo, existen otras opciones para cambiar el destino de la humanidad, aprovechando los adelantos tecnológicos y laboratorios científicos con las mentes brillantes de nuestro país.
Los desafíos del mañana son una preocupación para las autoridades y fundaciones chilenas. Pero no solo para ellos, sino que la población quiere conocer más sobre el trabajo de los científicos en relación a quienes somos y seremos en los próximos años. Esto explica el éxito de asistencia que tuvo en las once regiones del país la octava versión del “Congreso Futuro 2019”, instancia precisa para conversar sobre los problemas actuales y debatir soluciones creativas y sustentables.
“Estoy completamente segura que a toda la comunidad le interesan estos temas, especialmente si los rockstars de la ciencia nacional e internacional pueden aterrizar contenidos tan complejos a un lenguaje sencillo para que niños o personas que no están tan familiarizados con los tecnicismos se puedan empapar de estas apasionantes temáticas”, dijo Marisol Gómez, Jefa del Centro Integrativo de Biología y Química Aplicada, académica de la Escuela de Obstetricia y Puericultura y una de las expositoras protagonista de la última jornada del Congreso.
Entre las conclusiones de uno de los eventos más importantes de Latinoamérica, la Comisión de Desafíos del Futuro destacó el fomento de la divulgación científica, algo que nuestra académica celebra porque “exhibimos los trabajos que la mayoría de nosotros realiza en las universidades chilenas, generando un impacto en cada uno de los que asistieron o vieron las charlas y sea una conversación a la hora de almuerzo u once”.
Y esto último es lo que están potenciando los centros de investigación de la UBO, principalmente con la participación de nuestros investigadores en distintas instancias sociales como las Pasantías Explora-Conicyt.
Los científicos del mañana
Tal como ocurre con los éxitos deportivos nacionales, estas actividades internacionales pueden sembrar la semilla de la curiosidad en los niños para colocarse el delantal blanco y experimentar, inquietudes que serán claves para el desarrollo de soluciones a las problemáticas que se presentarán en las próximas décadas en beneficio de la sociedad.
“Con ‘Futuristas’ en el Congreso y los programas de Vinculación con el Medio que desarrollamos para que escolares visiten nuestros laboratorios, generamos las ganas de averiguar más cosas, de querer ser los próximos nobeles. En definitiva, a idea es asombrarlos y que los temas les queden dando vuelta en la cabeza para entusiasmarlos a ellos y contagien a su familia”, aseguró la académica de la UBO.
Inventar, analizar y, sobre todo, hacer los experimentos con sus propias manos son las claves para generar el interés, comenta Marisol, ya que si ellos participan activamente pueden interactuar con los materiales y se les pueden ocurrir cosas inimaginables.
“Estoy segura que con esto se puede tener más científicos. Una vez trabajé en un programa de talento académico y, actualmente, ese grupo está estudiando una carrera científica en la universidad, por lo que concluí que algo dejamos en ellos. Entonces, analicé que si en una clase de 40 niños, 2 de ellos se interesan, nos damos por pagados”, manifestó la jefa del CIBQA.
Tras siete días de interesantes exposiciones, la investigadora de nuestra Casa de Estudios recomienda revivir las charlas, para instruirse y debatir sobre las temáticas del futuro, traspasando las ganas de aprender a los más pequeños de la casa, quienes tienen una enorme capacidad de absorber conocimiento y las ganas de generar un cambio en beneficio de las generaciones del mañana.
