La decana de la Facultad de Ingeniería, Ciencias y Tecnología de la Universidad Bernardo O’Higgins, Dra. Katherine Delgado, estudió Ingeniera Civil Químico en la Universidad de Chile, casa de estudios donde realizó su doctorado. Actualmente, la Ingeniera, científica y emprendedora, se ha destacado por liderar el comité de género en la Asamblea Extraordinaria de la Corporación de Facultades de Ingeniería de Chile (CONDEFI).
¿Cuál es la importancia de la CONDEFI?
-La Corporación de Facultades de Ingeniería de Chile tiene como misión velar por la formación de ingenieros de clase mundial. Particularmente, esta asamblea extraordinaria tuvo como fin resguardar el desarrollo de postgrado, entendiéndose magister y doctorados, que tienen vinculación con la industria o un área más tecnológica. Esto es muy importante, porque la Comisión Nacional de Acreditación (CNA) estableció nuevos parámetros de acreditación orientados en el perfil de los profesionales que lideran esos postgrados. Es decir, más enfocado con el reconocimiento (cuántos años trabajaste en el área o proyecto lideraste), más que en lo académico.
Lideró el comité de género ¿Qué puntos trataron en la Asamblea?
-Tuve el privilegio de presentar los progresos del comité. Durante esta presentación, se pudo evidenciar un destacado trabajo colaborativo en el que abordamos los desafíos y oportunidades desde diversas perspectivas. A través de un proceso de escucha activa, reflexión y negociación, logramos establecer directrices compartidas. Estas directrices nos permitieron formular objetivos que no solo reflejan la identidad distintiva de CONDEFI, sino que también brindan un sólido respaldo a las iniciativas que cada facultad emprenda para promover la equidad de género.
Actualmente ¿Siente que ha disminuido la brecha de equidad?
-No, todo lo contrario. Los estudios y el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación han asegurado que la brecha aumentó después de la pandemia. Las mujeres aparte de ser profesionales tienen que asumir, por una cuestión cultural, otras responsabilidades que tiene que ver con el cuidado de los hijos, el cuidado de adultos mayores, entre otros. El tema de la pandemia lo que hizo fue abstraerlas del mundo laboral, para hacerse cargo de las familias.
¿Se está trabajando para revertir esta realidad?
-El trabajo ha sido bastante difícil. Por lo mismo, el tema cobró mayor relevancia en la mesa que lideramos durante la última jornada de la CONDEFI. Incluso, el Estado ha tratado de revertir esta situación indicando en sus bases, una cuota mínima de género para las postulaciones a investigaciones o proyectos institucionales. Por ejemplo, la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) entrega un puntaje adicional en las postulaciones cuando se cumple con este ítem. Además, estamos trabajando en el empoderamiento y la visibilización de las mujeres ingenieras, para acortar la brecha en futuras generaciones.
A su parecer ¿Por qué la carrera es vista como una profesión solo para ingenieros?
-Eso tiene que ver con algo más bien cultural, con el ciclo de vida. Desde que somos pequeños/as, no has generados ciertos estereotipos como los colores, los juguetes y pasa lo mismo con determinadas carreras. Los padres tienen ciertos sesgos donde los hombres son mejores para ciertas cosas y las mujeres, con capacidades para otras. Cuando vas a realizar charlas a alumnos/as de 4° medio, puedes identificar esos estereotipos. Las mujeres tienen claro lo que van a estudiar, ya sea por decisión propia o influenciadas por las familias. Por lo tanto, el trabajo debería realizarse antes, desde la enseñanza básica y decirles que las carreras, independiente a la que quieran estudiar, no tienen género. Además, es completamente falso que las mujeres carecen de ciertas habilidades o talentos en el ámbito de las asignaturas científicas.
¿La Facultad está trabajando para reducir la brecha y romper dichos estigmas?
-En esta facultad tenemos paridad de género en cargos directivos, un signo que los estudiantes pueden visibilizar, especialmente, dentro de sus directores de escuela. Estudié Ingeniera Civil Química por esa misma razón, porque tenía un profesor que fue un referente a seguir. Para el próximo año tenemos matrículas reservadas, exclusivamente para mujeres, en carreras más tecnológicas (Ingeniería en Informática e Ingeniería en Realidad Virtual y Diseño de Juegos Digitales), donde tenemos la mayor brecha. Además, estamos trabajando para implementar un plan de acompañamiento. La idea es que estudiantes de cursos avanzados, acompañen a las estudiantes de primer año para hacer más fácil la transición desde la media a la universidad. Ayudando así, a la retención de éstas.